Las pestañas además de resaltar la mirada y la belleza del rostro, tienen como principal objetivo, proteger a los ojos del polvo y cuerpos extraños, además de filtrar la luz solar para hacerla más soportable. Es por esto que debemos mantenerlas sanas y fuertes, evitar ciertas prácticas y malos hábitos diarios que pueden dañarlas.
El ciclo de vida de una pestaña puede verse reducido por alguno de los siguientes factores produciendo fragilidad, caída, y lento crecimiento de las pestañas.
Mala alimentación, nos produce una carencia de vitaminas y oligoelementos.
Frotarse los ojos, ya que esto produce adelgazamiento de la piel, en el contorno de los ojos.
No desmaquillarse, el rímel para las pestañas se endurece con el paso del día y las pestañas se quiebran con mayor facilidad, especialmente con las que son contra agua.
Te recomendamos los siguientes cuidado y consejos para cuidar tanto de tus párpados, como de tus pestañas:
Aunque no acostumbres a maquillar tus pestañas, es conveniente cepillarlas diariamente con un peine especial y extender sobre ellas una fina capa de vaselina, aceite de ricino o un sérum fortalecedor específico para favorecer su crecimiento.
Hay que desmaquillarlas con mucho cuidado cada noche y con productos específicos que las protegerán.
Trata de elegir un rímel de calidad, enriquecido con pantenol, ya que aporta vitamina B5, ceramidas y factor de protección solar.
No prestes, ni uses maquillaje ajeno al tuyo, así evitarás el contagio de bacterias por vía ocular.