El apio es una verdura que se da más en invierno, pero sus propiedades son tantas y tan importantes que su consumo es muy recomendable durante todo el año.
La riqueza nutricional del apio la encontramos en los aceites esenciales que contiene, como selineno, cimo y limoneno, además contiene cumarinas, que es un anticoagulante de origen vegetal y que se utiliza mucho en la fabricación de medicamentos. Es rico en sales minerales, especialmente hierro, fósforo, manganeso y calcio. Más del 90% de su composición es agua, por lo que es un alimento muy hidratante, sin aporte calórico y con un efecto saciante.
Todas estas propiedades son las que lo hacen un alimento diurético y antioxidante por excelencia.
Pero, ¿quieres conocer más sobre los beneficios de comer apio?
Su alto contenido en agua, la combinación de potasio, sodio y aceites esenciales, lo convierten en un alimento que ayuda al organismo a eliminar líquido, limpiándolo de toxinas que se van acumulando con el tiempo en nuestro interior y que pueden derivar en enfermedades importantes.
Un alimento ideal para aquellos que sufren colesterol e hipertensión arterial.
La alta concentración de agua y fibra, también lo convierten en un alimento para perder peso y por eso es una gran protagonista en estas mismas dietas.
Otro de los beneficios de comerlo es que tiene efectos sedantes, por lo que es un buen alimento con el que se puede contrarrestar la ansiedad e incluso ayuda a conciliar el sueño.
Al tener vitamina C y ácido fólico, es un poderoso aliado para regular la menstruación, ya sea escasa o abundante, y también contribuye a aliviar los síntomas de la menopausia.
Desde ahora, no dudes incluir esta verdura en tus alimentos.